El Ayuntamiento autoriza la exhumación de restos de represaliados en el cementerio viejo de Benamahoma
Los trabajos serán subvencionados
por la Junta y la Diputación y contarán además con apoyo
económico y logístico del Ayuntamiento
El Ayuntamiento de Grazalema ha
autorizado a la Junta de Andalucía para que intervenga en el antiguo
cementerio de Benamahoma, adonde se pretende exhumar los restos de
decenas de personas que fueron represaliadas durante el golpe militar
del año 36. La Junta de Andalucía, a petición de ayuntamientos
serranos como los de Grazalema o El Bosque o la propia Diputación
Provincial, ha decidido que este sea uno de los lugares adonde se
intervenga, a partir de la decisión adoptada antes del verano por el
llamado Comité Técnico de Coordinación de Exhumaciones, del que
forma parte la propia Administración andaluza así como colectivos
memorialistas de dilatada trayectoria en la comunidad y
representantes de ayuntamientos, diputaciones y la FAMP.
Los trabajos serán coordinados por un
equipo técnico multidisciplinar, con amplísima experiencia en estos
trabajos, dirigido por el historiador serrano Jesús Román. Así lo
indica el protocolo de exhumaciones de la Junta de Andalucía de
2009.
Será la propia Junta la que financie
la actuación, en colaboración con la Diputación de Cádiz. El
Ayuntamiento de Grazalema colaborará también en numerosos aspectos
logísticos y normativos del proceso de exhumación.
El alcalde pedáneo de Benamahoma,
Manuel Tovar, junto al historiador Jesús Román y el técnico
municipal han visitado el antiguo cementerio (actual Parque de la
Memoria Histórica) para proyectar el inminente inicio de los
trabajos.
“Estas actuaciones se van a llevar a
cabo por la petición de casi una veintena de familias de Benamahoma,
El Bosque, Prado del Rey y Villamartín, que llevan años
reivindicando una sepultura digna para familiares suyos cuyos restos,
bajo cal, se encuentran apilados en este lugar. Tras unas catas
realizadas el invierno pasado en este lugar, los investigadores han
puesto de manifiesto que al menos podría haber cuerpos de unas 50
personas. En tres pequeñas intervenciones en apenas varios metros
cuadrados aparecieron restos de una decena de personas, lo que
certifica la existencia de distintas fosas comunes en este lugar, de
acuerdo a lo que habían transmitido muchos mayores que recordaban o
incluso presenciaron los crueles actos de represión. La presencia de
cal y la propia disposición de los cuerpos atestiguan las maneras de
proceder de los represores”, ha explicado el alcalde del municipo,
Carlos Javier García, quien subrayó “el máximo interés del
Ayuntamiento a la hora de colaborar con este proyecto, dado el empuje
de muchos familiares y el feliz encuentro entre tres administraciones
convencidas de que es necesario restituir la memoria: el
Ayuntamiento, la Diputación y la Junta de Andalucía. A pesar del
paso de los años y de llegar muy tarde, vamos a intentar responder a
los familiares”, explicó el regidor.
García puntualizó que “los trabajos
se desarrollarán en dos fases, que serán continuadas en el tiempo,
a lo largo de estos últimos meses de 2017 y principios de 2018.
Existe un compromiso institucional de la Junta y Diputación para
poder concluir la exhumación completa de estas fosas comunes”,
aclaró. El regidor recordó que “al menos que se sepa, hay entre 4
y 5 fosas comunes más en el término municipal. Nos gustaría ser
capaces de recuperar todos los restos. Es una obligación moral para
cerrar unas heridas que no han sanado porque fueron mal tapadas hace
ahora 8 décadas”.
LLAMAMIENTO A LOS FAMILIARES
El Ayuntamiento y la Diputación han
hecho además un llamamiento a cuantos vecinos de toda la comarca
puedan tener familiares suyos en Benamahoma, que se convirtió
tristemente en un negro epicentro de la represión en la Sierra de
Cádiz: “Hay una veintena de familias que estarán, desde ahora, en
directo contacto con los técnicos que exhumarán los restos. Son las
familias que no han cesado de solicitar Justicia y reparación. Pero
hay muchos más restos, y sería un verdadero acto de Justicia poder
identificar al mayor número posible de víctimas”, explicó el
alcalde. El objetivo de la administración es que puedan practicarse
exámenes de ADN de los restos para intentar identificar a las
víctimas gracias a sus familiares vivos, para lo que la Junta de
Andalucía se apoyará nuevamente en los novedosos sistemas de la
Universidad de Granada, con la que trabaja en esta materia.