Mas teatro, mas actuaciones en directo, mas espacios escénicos y la mejor predisposición de los grazalemeños con su recreación histórica

Grazalema se entrega ya con ilusión a la IV edición de su recreación histórica “Sangre y Amor en la Sierra” que rememora su pasado bandolero con la figura del célebre bandolero José María “El Tempranillo” como eje de la historia.

La acogida de la cuarta edición vuelve a ser extraordinaria con una ocupación hotelera del cien por cien en reservas realizadas en su mayoría desde hace casi un mes.
Así en previsión de un gran número de visitantes, el ayuntamiento ha habilitado varias zonas de aparcamiento: la zona de la ermita de la Virgen de Los Angeles, junto al nuevo pabellón polideportivo, junto al instituto de secundaria y en el campo de fútbol Peñón Grande.
Esta cuarta edición de Sangre y Amor en la Sierra presenta novedades en su desarrollo tales como la apertura mas temprana de las casas bandoleras tanto el sábado como el domingo en que abrirán sus puertas a partir de las 11 de la mañana.
Se establece un punto de información global situado en la Oficina de Turismo en la Plaza de Los Asomaderos, que a su vez será la biblioteca de 1800 con venta de libros y grabados.
La recreación se verá además enriquecida por un mayor número de escenas teatrales en total 21 escenas, 13 de ellas nuevas que recorrerán la vida del Tempranillo en Grazalema y sus correrías, sazonadas con buenas representaciones de acción bandoleras o de la vida cotidiana de aquel tiempo, que se representarán a lo largo del fin de semana, en las que veremos acción, drama, amor e incluso humor sobre cinco escenarios diferentes a los que se suma el ayuntamiento de Grazalema transformado en el evento en cuartel de los migueletes.
Para disfrutar de la recreación 19 casas bandoleras abrirán sus puertas decoradas con esmero al estilo 1832 y en las que se podrá comer exquistas tapitas de la época, comprar recuerdos o sólo mirar y disfrutar.
Si se desea comer no faltarán viandas tan sugerentes como el chorizo asado,en manteca o en medio de un pincho bandolero junto a la morcilla y el tocino, los callos, las tortitas de bacalao,los chicharrones, carnes a la brasa así como una amplia variedad de tapas todas basadas en la gastronomía de la época recreada, para endulzar el paladar no faltarán un año más los buñuelos, las tortas de masa, el pan frito con miel, el chocolate y el café.
Encontrarán en este fantástico recorrido en pleno siglo XIX espacios para disfrutar de las compras en el-“Monasterio de San Jose”habrá venta de articulos religiosos, en el “Huerto San Jose”: venta de vinos, quesos y dulces caseros y en la “ Casa de la Luz” le realizarán retratos al instante.
El cante y el baile flamenco también forman parte de los atractivos de esta Grazalema de antaño con cantes que oiremos en las casas y escenarios con las actuaciones de los cantaores Aguilar de Vejer, Niño de Medina, Ana Gómez e Isabel Posada con la guitarra de Miguel Chamizo. En el baile nos deleitará en diferentes actuaciones el bailaor Fran Busquiel.
Todos estos aspectos conforman una atmosfera que atrapa y atrae a quien la disfruta en primera persona y lo hace sentirse al cien por cien partícipe de la historia